El día de la despedida, no pude hablar mucho con ellos, no hablo francés...Pero sus caras, lo decían todo. Reflejaban una gran satisfacción por la gran acogida y con el sentimiento de un gran deber cumplido: EL APRENDIZAJE.
A continuación, unas palabras de la profe Trinidad Arias Albanes, que lo dicen todo.
Muchas gracias señorita Trini por tu sinceridad e implicación.
"En primer lugar, tengo que agradecer al centro el haberme dado la oportunidad de haber vivido una experiencia tan bonita y enriquecedora como docente al haber compartido durante dos semanas mi trabajo con otros docentes de Bélgica.
Tanto los alumnos de 3º B como yo,hemos vivido unos días diferentes de los cuales hemos aprendido muchas cosas que seguro tanto los pequeños como yo no olvidaremos en mucho tiempo.
A nuestra clase llego el profe Onur, y desde el segundo uno el grupo lo acogió con total confianza y alegría.
El nuevo profe despertaba mucho interés y curiosidad...querían conocerlo todo de él y rápidamente comenzaron a intercambiar palabras con Onur, pero había un problema, ¡no sabía español! Perdonad, ¿he dicho problema? para nada. Todos sacaron de sus cabecitas todo lo aprendido durante estos cursos y empezaron a intercambiar palabras y oraciones en francés sin ninguna vergüenza o miedo.
Este es el punto de partida, la comunicación bilateral que hubo entre él y ellos. La experiencia tan enriquecedora que supone que todos aprendamos los unos de los otros. Sin miedos y sin tapujos aunque seamos de culturas diferentes y hablemos lenguas diferentes.
Hay que agradecer a Onur su implicación durante estas semanas, ha trabajado como el que más, codo con codo conmigo, integrándose en todos los aspectos de las rutinas de la clase y haciéndose con el grupo desde el principio.
El intercambio de ideas, opiniones y de formas de trabajo entre España y Bélgica creo que nos ha servido a los dos como fuente de energía para convertirnos cada día más en mejores maestros y personas. Amboss hemos llegado a una especie de definición sobre lo que queremos hacer y ser en esta labor tan bonita que desempeñamos los dos.
Por último también quiero agradecer a mis 25 niños y niñas de la clase de 3ºB así como al resto de cursos que han compartido alguna sesión con él, el esfuerzo tan grande que han hecho al comunicarse con Onur utilizando el francés y rectificando cuando empleaban el español. Además hay que destacar que la curiosidad que suscitaba la situación, hacia que los niños buscaran en el diccionario de francés, preguntarán cómo poder decirle las cosas...eso es lo bonito de toda esta experiencia, el poder comprobar como el futuro tiene ganas de aprender y llegar lejos en la vida.
Todos en la clase nos despedimos con mucha pena de Onur y de esta experiencia tan bonita, de la cual sin duda quiero y deseo volver a repetir en el siguiente curso.
Un saludo"